"La democracia no te asegura la felicidad, pero te da los instrumentos para llegar lo más cerca posible"
El día 7/11 los alumnos de 7mo grado realizaron una entrevista al ex
soldado de Malvinas Héctor Francia. El entrevistado brindó una charla para 6to y 7mo sobre la
importancia de la ubicación de las islas, así como la riqueza de sus recursos. Luego,
respondió las preguntas que los estudiantes ya habían pensado previamente, para
compartir sus apreciaciones con la comunidad.
¿Cómo fue su reacción al enterarse que
iba a ir a las islas?
Héctor: Bueno, nosotros no sabíamos dónde íbamos a ir. Nos
presentamos el 9 de abril del 82 en el
Regimiento 7 y a los tres días subimos a unos colectivos hacia Palomar.
Probablemente no tendríamos que haber ido tan al sur pero bueno…Habían decidido
que fuéramos en avión hasta Río Gallegos y de Río Gallegos a Puerto Argentino.
¿Cómo fue su llegada a las islas?
Héctor: Bueno, era preparador de mortero. O sea, preparaba las
municiones para el mortero que tiene sus problemas porque llevás un explosivo
que va en la punta, que se llama espoleta. Es algo feo porque yo llevaba seis
municiones, con cartuchos y todo. Entonces me senté en el avión con otros
compañeros en el piso y fuimos hasta Río Gallegos y después hacia el
aeropuerto. Allí tomamos otro avión y fuimos hacia Malvinas.
¿Cuál fue tu reacción y de tus compañeros
cuando se enteraron que Argentina se había rendido?
Héctor: La guerra te impacta de manera de que algunos quieren que
termine rápido, otros no saben ni donde están, quieren salir vivos. La reacción
depende de cada uno, de cómo se siente. Nosotros éramos gente común. No éramos
de la guerra. Un profesional de la guerra se siente derrotado y vos en lo que
pensás es en seguir adelante con tu vida.
¿Cómo los recibieron en el regreso?
Héctor: La dictadura. Si vos eras militar de aquella época y te
metés en una guerra y la perdés.... Perdiste lo que vos hacías, entonces tenían
mucha vergüenza ellos. Para evitar vernos así, nos metieron en escuelas
militares y ahí nos daban mucho de comer para engordarnos y para que después,
nuestros padres no tuvieran bronca porque no se habían encargado de los
abastecimientos. Ahora me ven así, gordito como estoy, pero en esa época pesaba
55 kilos. Había perdido mucho peso. Ellos nos ocultaron al principio y a la
noche nos largaron de vuelta.
¿Cómo encontraste al país después de la
guerra?
Héctor: Mirá...el país estaba en una confrontación para que esa
dictadura que había perdido la guerra se retirase y comenzara la democracia…
que ahora se cumplen 40 años. La felicidad es un camino de cada uno como
persona y también de los grupos a los que pertenecemos como la familia, el
colegio, la sociedad en sí. La democracia no te asegura la felicidad, pero te
da los instrumentos para llegar lo más cerca posible. Entonces muchos de
nosotros militamos, fuimos a las manifestaciones para que la dictadura se fuera
y hubiera democracia.
¿Qué fue lo primero que hiciste al
volver? ¿Cómo siguió tu vida?
Héctor: Yo estaba en el hospital de Campo de Mayo. En esa época,
estaba un poco triste por toda la violencia. Si a ustedes yo los pongo en una
situación violenta, que espero que nunca tengan, es una situación donde tenés
todos los sentidos puestos en eso. Por ejemplo, en un partido de fútbol, en el
que estás hoy conectado, te sacan el partido y vos quedás en medio como
confundido, quedás todavía con la aceleración del partido, pero fuera del
partido. Eso pasó en la guerra. Por eso, hay que aprender de la violencia.
Muchos de nosotros tuvimos que tener asistencia médica, a pesar de que el
Estado no nos la dio hasta años después y, por eso, lamentablemente, algunos de
nuestros compañeros decisiones muy tristes.
¿Continuás teniendo vínculos cercanos con
compañeros hoy en día?
Héctor: Sí, soy secretario de un grupo de ex conscriptos,
combatientes por Malvinas y nos dedicamos a estas tareas y muchas veces estuvimos
en la cancillería porque iniciaron esto que hacemos con ustedes. Bueno, lo
mismo que hacemos acá hay que hacerlo con los funcionarios porque a veces se
equivocan. Entonces, hay una campaña de formación en el tema Malvinas, así que estuvimos
en cancillería y vamos a los colegios, a las fábricas y a todas partes para que
generar conciencia. Porque justamente ustedes, los alumnos, son combatientes
por Malvinas, pero no con armas, combatientes porque dicen que son nuestras. Y las
mujeres, también son combatientes por Malvinas.
¿Volviste
o volverías a las islas?
Bueno, ahí está el tema. Si vuelvo tengo que pagármelo yo, porque mi
municipio no me lo paga, pero más allá de eso, yo hice un proyecto de
documental que presenté donde había una parte que era una recorrida geográfica
para que todos ustedes puedan ver cómo son las islas. Alejandro DAndrea, que
volvió en 2006 muestra todo eso. Otra parte de ese proyecto incluía ir a los
lugares históricos, pero no sólo a los lugares de combate, sino ir a lugares como
Puerto Luis, donde estuvo Vernet. Y otra parte, era ver si podíamos entrevistar
alguna autoridad colonial y después poder darle nuestros argumentos, pero no
conseguí financiamiento. Volver a Malvinas, yo volvería… pero ha habido varios
incidentes con los colonizadores británicos, no te dejan mostrar la bandera de
Argentina. Entonces yo no tengo tantas ganas de volver, mientras estén ellos. Ahora,
si es para hacer algo para ustedes, sí, para que lo puedan ver.
¿Cómo le gustaría que lo recuerden?
Héctor: Con el amor de mis hijos y de mis
nietos.
¿Cómo se sintió en esta entrevista?
Héctor: Muy bien, acompañando del futuro de
nuestro de nuestro país. Estoy orgulloso de todos ustedes.
Transcripción: Uma Bravo, Jeremías Gonzalez, Daiana Bravo